Dr. Rubén Alcantud, geriatra
¿Por qué es tan importante la depresión en las personas mayores?
La depresión en personas mayores es un trastorno del estado de ánimo que causa sentimientos persistentes de tristeza, desesperanza y pérdida de interés en las actividades cotidianas.
No es una parte normal del envejecimiento, sino una enfermedad mental que interfiere significativamente en la vida diaria y en el bienestar de la persona mayor.
En Europa, entre el 6% y el 20% de las personas mayores pueden padecer depresión y esta cifra puede aumentar hasta el 30-50% en aquellos mayores que se encuentran institucionalizados en residencias. Además, a nivel mundial, alrededor de una cuarta parte de las muertes por suicidio se producen en personas de 60 años o más.
¿Cuáles son las causas de la depresión en personas mayores?
Las causas más comunes incluyen:
- Cambios significativos en su vida como mudanzas o pérdida de independencia.
- Dolor, problemas de movilidad o enfermedades crónicas.
- Fallecimiento del cónyuge o seres queridos.
- Problemas familiares.
- Aislamiento social y soledad no deseada.
- Efectos secundarios de algunos medicamentos.
- Encontrarse institucionalizado en una residencia.
- Depender económicamente de otra persona.
- Factores genéticos y biológicos.
¿Cuáles pueden ser los primeros síntomas de la depresión en las personas mayores?
Los síntomas iniciales pueden incluir:
¿Cuáles pueden ser las consecuencias de la depresión en las personas mayores?
Si no se trata, la depresión puede llevar a:
- Deterioro de la salud física y mental.
- Mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Aislamiento social.
- Abuso de alcohol u otras sustancias.
- Pérdida de independencia.
- Mayor riesgo de suicidio.
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¿Cuándo debería consultar con un especialista?
Es recomendable buscar ayuda de un geriatra o un psiquiatra si:
- Los síntomas persisten.
- Interfieren significativamente en la vida diaria.
- Hay pensamientos de muerte o suicidio.
- Los síntomas no mejoran con el apoyo de familiares y amigos.
Es importante recordar que la depresión en las personas mayores tiene tratamiento. Con el apoyo adecuado y atención médica oportuna, las personas mayores pueden recuperar su calidad de vida y bienestar emocional.
2.
¿Cómo se suele realizar su valoración y diagnóstico?
El proceso para su valoración suele incluir:
- Exploración física completa.
- Análisis de sangre para descartar otras causas.
- Evaluación psicológica mediante entrevistas y cuestionarios.
- Revisión de la historia clínica y medicamentos.
- Posible derivación a un especialista en salud mental para una evaluación más exhaustiva.
Recomendaciones para prevenir la depresión en personas mayores:
1. Mantenga una vida social activa participando en actividades grupales, uniéndose a clubes sociales para personas mayores o fomentando el contacto regular con familiares y amigos, ya que el aislamiento y la soledad no deseada son factores de riesgo importantes para la depresión en ancianos; sentirse acompañado y evitar la soledad ayuda a tener la mente ocupada y distraída, reforzando la salud emocional.
2. Realice ejercicio físico de forma regular, adaptado a sus capacidades y bajo supervisión médica si es necesario, pues la actividad física mejora el estado de ánimo, aumenta la energía y promueve un mejor descanso; además, el ejercicio mejora el flujo sanguíneo, lo que contribuye a un mejor humor y es beneficioso para la salud física en general.
3. Mantenga su mente activa con actividades estimulantes como juegos de cartas, lectura o aprendizaje de nuevas habilidades, ya que estas actividades no solo ofrecen momentos de ocio y bienestar, sino que también ayudan a entrenar la lógica y la memoria, lo cual es fundamental para mantener una mente saludable y prevenir el deterioro cognitivo.
4. Siga una dieta equilibrada y saludable, rica en vitaminas, antioxidantes y ácidos grasos esenciales como los que se encuentran en el aceite de oliva o el pescado azul; una buena alimentación es crucial para mantener un buen estado de ánimo y proporcionar al cerebro los nutrientes necesarios para su correcto funcionamiento.
5. Establezca rutinas diarias y prepárese para los cambios con antelación, ya que saber qué va a pasar ayuda a sentirse más seguro y reduce el nivel de ansiedad; es importante mantener una estructura en el día a día y anticipar cualquier cambio que pueda alterar la rutina habitual.
6. Practique técnicas de relajación para aprender a gestionar el estrés y la ansiedad; estas prácticas pueden ayudar a mantener una actitud positiva y a enfrentar mejor los desafíos emocionales que puedan surgir en esta etapa de la vida.
7. Mantenga una adecuada rutina de descanso, procurando dormir entre siete y nueve horas cada noche; los problemas de sueño pueden contribuir a la depresión, por lo que es fundamental establecer una rutina de sueño saludable y consistente.
8. No dude en buscar ayuda profesional si nota síntomas persistentes de tristeza, desesperanza o pérdida de interés en actividades que antes disfrutaba; un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden prevenir que la depresión se agrave y mejorar significativamente su calidad de vida.
Enlaces de interés
- Las personas mayores y la depresión: pinche aquí
- Soledad y aislamiento social – Consejos para mantenerse conectado: pinche aquí
